Fuego camina conmigo.

Le dije: "Monta que te llevo al sol";
me dijo: "¡Qué tontería, arderás!", le dije que no pensaba ir de día y se reía, ya verás le decía si te fías de este guía. Dicen que cuando llegas hay un flash, y me creía, me daba alas, parábamos a dar caladas en coordenadas desordenadas, sentados en el meridiano de Greenwich, dejábamos colgar las piernas...

Marvin Gaye, he's God.

domingo, 20 de noviembre de 2011

Unos tanto, y otros tan poco.

  Hablo de algo que vemos con frecuencia en nuestra sociedad, pero no prestamos demasiada atención. ¿Alguna vez se han parado a pensar la faraónica diferencia que existe entre los países desarrollados y los subdesarrollados?

   En un país desarrollado la gente suele tener un nivel económico medio para sobrevivir, algunos algo más y los casos especiales de exceso de bienes, pero, en los pasíses tercer mundistas no existe esta clasificación a groso modo que podemos establecer, pues carecen de todo.

   En muchos países de América del sur, y en casi todo el continente africano, lo que a nosotros nos parece algo insignificante, allí es una cuestión de vida o muerte.

  El tercer mundo está muriendo de cáncer, los tumores son la principalcausa de muertes en estos países, ¿por qué? El cáncer es una enfermedad que puede causar pavor en las personas, pero los que tienen la suerte de vivir en un país desarrollado saben que es menos grave. Poseemos especialistas, centros hospitalarios, y los mayores avances médicos y científicos, ¿por qué temer? Esto no sucede en los países pobres. Para ellos un bien escaso es el agua y el alimento, así que es impensable la presencia de remedios contra esta enfermedad del diablo.

   Con esta entrada no busco más que conozcamos lo que tenemos, y que la educación es una suerte. Y que aprendamos a valorar el pulsar un interruptor y que se haga la luz, o abrir un grifo y que salga agua. 

Fuente foto: Google imágenes. 

2 comentarios:

  1. ¡Qué gran verdad! Ahora con la crisis, más se acentúan esas diferencias, pero por desgracia el mundo rico está pensando en su dinero y en como no perderlo.

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  2. Sí, es una auténtica pena la sociedad en la que vivimos hoy día. El que es rico es rico e intenta forzar el mercado para conseguir más y poco importan los demás.

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